El documento Posicionamiento Político y Plan de Acción de las Mujeres Indígenas del Mundo fue adoptado en la conferencia global de mujeres indígenas que se celebró en Lima-Perú- del 28 al 30 de octubre de 2013. El comité organizador de dicha conferencia ha difundido este documento recordando que forma parte del plan de incidencia rumbo a la Conferencia Mundial sobre Pueblos Indígenas, Cairo+20, Beijing+20 y la Agenda de Desarrollo Post-2015 de Naciones Unidas, para construir una nueva agenda mundial. A lo largo de sus 25 páginas, el documento incluye tres secciones principales: Posicionamiento político, Estrategias de Acción y Ruta de Incidencia.
El Plan de Acción tiene el objetivo de contribuir a la articulación estratégica entre redes y organizaciones de pueblos y mujeres indígenas de las siete regiones socioculturales, fortalecer el movimiento de mujeres indígenas, promover la participación proactiva y consensuada en espacios de toma de decisión y,finalmente, ser un marco guía para encaminar los múltiples esfuerzos para erradicar la violencia, discriminación, racismo y pobreza que viven mujeres indígenas.
El plan de acción pretende contribuir a erradicar la violencia, la discriminación, el racismo y la pobreza que viven las mujeres indígenas alrededor del globo.
“Las mujeres indígenas debemos participar de todas las mesas de diálogo y espacios de toma de decisión respecto de estos asuntos y todos los temas que nos conciernen y al derecho de participación política que nos asiste”
El documento incluye algunas alertas importantes, de todas ellas, las más significativas son las siguientes:
En relación a la salud sexual y reproductiva de las mujeres indígenas , hubo consenso y alarma por la persistente discriminación, exclusión y criminalización de las facilitadoras de prácticas de salud tradicionales, lo que constituye una violación a los derechos a salud sexual reproductiva y representa actos de violencia contra las mujeres indígenas.
El documento señala que la presencia de las industrias extractivas en territorios indígenas ha degenerado en una sistemática violencia contra las mujeres, protectoras ancestrales de la naturaleza; la industria extractiva conlleva militarización, tráfico, uso de pesticidas y violaciones sexuales de mujeres y niñas indígenas.
Como resultado, desde África hasta América Latina, ellas son hoy desplazadas de sus territorios, captadas por redes de trata de personas y abusadas sexualmente.
De perpetuarse las diversas formas de violencia contra las mujeres indígenas, el conocimiento ancestral sobre los recursos naturales se habrá perdido para siempre.
Una de las demandas principales se dirige a los Estados a fin que tracen un nuevo modelo económico redistributivo, solidario y sustentable.
Asimismo, recuerdan que la participación de las comunidades en la administración de los recursos naturales ha demostrado ser efectiva y que por tanto, principios como el derecho al consentimiento previo, libre e informado deben ser respetados.